Mario Cañas
La séptima generación de este campeón de ventas de la marca alemana llega ésta semana a las agencias, que tiene Volkswagen en territorio nacional, y lo hace con un nuevo diseño que dividirá opiniones entre los fanáticos de éste vehículo y las nuevas generaciones.
Los cambios en su carrocería saltan a la vista, toda vez que, presume de la nueva genética que VW le está imprimiendo a sus nuevos lanzamientos, destaca un frente más deportivo y aerodinámico, así como un perfil lleno de líneas de carácter que le adjudican mayor emotividad y un sentido de movimiento orientado hacia el frente, mientras que la parte trasera recoge la musculatura y le da un look más sofisticado, en relación con las anteriores entregas.
Desde luego, lo más relevante es que deja en el pasado los motores aspirados 2.0 y 2.5 litros, para adoptar el nuevo y eficiente cuatro cilindros turbo (TSI) 1.4 L con una potencia de 148 caballos de fuerza y 184 lb-pie de torque, con transmisión automática de siete velocidades (DSG) con opción de decantarse por una manual de seis relaciones.
Como es de esperarse lo pondremos a prueba éstos días para dar un veredicto de si es lo que esperamos o simplemente nos vendieron espejitos. Ya veremos.